Un equipo internacional de investigadores liderada por científicos pertenecientes a universidades chilenas y estadounidenses ha publicado en la revista Neuron un artículo titulado “Excessive release of inorganic polyphosphate by ALS/FTD astrocytes causes non-cell-autonomous toxiticy to motoneurons” (doi.org/10.1016/S0140-6736(22)00012-5) en el cual se publica un importante descubrimiento. Han hallado que una sustancia inorgánica liberada por las células nerviosas conocidas como astrocitos contribuye a la muerte de las neuronas motoras, característica principal de esas dos enfermedades.
Los astrocitos se encargan de regular los mecanismos antioxidantes que defienden a las neuronas de sustancias derivadas del oxígeno que puede ponerlas en peligro, así como intervienen en la nutrición neuronal y en el control de neurotransmisores, para que no actúen en exceso, entre otras funciones.
Investigaciones anteriores han demostrado que los astrocitos pueden hacer que se liberen factores tóxicos que contribuyan a la muerte celular. Estos últimos, denominados poliP, se hallan en todos los organismos vivos, desde las bacterias en adelante. Suelen ser necesarios para las células, ya que almacenan energía, forman los canales de las membranas, regulan la actividad de los genes, las enzimas y las respuestas al estrés.
El escrito halló una relación entre los genes mutados que se han encontrado en las dos enfermedades y alteraciones en estos polifosfatos que, en lugar de beneficiar, perjudican. Según destacan los investigadores, se llevaron una enorme sorpresa al descubrirlo.
Se destaca que la importancia de este trabajo reside en que estos hallazgos brindan una perspectiva enteramente novedosa tanto para la consideración de la Esclerosis Lateral Amiotrófica como para la Demencia Frontotemporal, brindando importantes hipótesis y posibilidades de conocer en profundidad los biomarcadores de las enfermedades y para elaborar nuevas formas de tratamiento, aunque los resultados que se presentan en la publicación se reputan, como suele ocurrir, como preliminares.
El tiempo y nuevos ensayos dirán si se abre la puerta para la cura o, por lo menos, para la detención del progreso de dos enfermedades extremadamente crueles y mortales.