Investigadores pertenecientes a la Universidad de Harvard han publicado un artículo en la revista Cortex que sugiere que esta enfermedad es mucho más frecuente de lo que se cree, ya que, según ellos, afectaría a aproximadamente al 3,08% de la población mundial.
Los estudios indican que esta condición puede presentarse desde el nacimiento o también es posible adquirirla a cualquier edad.
En el caso de la variante congénita, se afirma que la prosopagnosia se debe a diferencias estructurales o funcionales en las zonas del cerebro encargadas del reconocimiento de los rostros, principalmente el giro fusiforme, el lóbulo temporal y la corteza occipital.
En lo que respecta a la adquirida, la misma se produce frecuentemente por daños en dichas zonas ocasionados por accidentes cerebrovasculares, lesiones en la cabeza o tumores.
Muchas de las personas que portan esta especie de ceguera se valen de diferentes estrategias para el reconocimiento de las personas con quienes tienen trato habitual, tales como el sonido de la voz, el color del cabello, la forma de moverse, etc.
Además de la historia clínica y la evaluación neurológica, las imágenes cerebrales suelen confirmar los problemas en dicho órgano y también existen pruebas tipo test que ayudan al diagnóstico, entre los que se citan Benton Facial Recognition Test, el Cambridge Face Memory Test y el Famous Faces Test.
Aunque no hay cura disponible, la intervención psicológica puede aliviar el estrés que se produce, mientras que ayudas asistivas como las aplicaciones de reconocimiento facial son una herramienta a considerar. También sirve que las personas del entorno conozcan el problema y brinden apoyo y comprensión.
De todas maneras, la portación no significa un problema insalvable para llevar adelante una buena vida. En todo caso, Brad Pitt, Gwynett Paltrow, Will Smith, Jennifer Lopez y otras celebridades como Steve Wozniak, cofundador de Apple, indican que se puede.