Partimos por concebir la rehabilitación como un proceso. Como tal se compone de distintas etapas, que muchas veces se superponen y retroalimentan.
Rehabilitación funcional: se basa en la intervención terapéutica. Sin duda es el inicio del tratamiento y el objetivo fundamental es la optimización de todos los recursos para lograr la mayor funcionalidad del niño en las de distintas áreas de su desempeño.
Capacitación y formación: en esta etapa aludimos a la inserción escolar si ésta es posible, y a la capacitación del sujeto de acuerdo a las áreas de su interés.
En un primer encuentro se realiza una minuciosa evaluación del paciente y de la dinámica familiar. Luego, en reuniones de equipo se realiza un análisis de los principales síntomas detectados y de la demanda familiar, dando así origen a una propuesta de trabajo: Estrategia terapéutica y Plan de tratamiento. En base a esto se establece la estrategia terapéutica y el plan de tratamiento. La reevaluación del plan de trabajo se realiza cada tres meses. De acuerdo a la evaluación realizada se define la inclusión en los distintos servicios: Kinesiología, Fonoaudiología, Terapia Ocupacional, Psicología, Psicopedagogía, Integración Escolar y Orientación Familiar, los cuales trabajan desde un enfoque integral y transdiciplinario. Asesoramiento en Hidroterapia, Equinoterapia y Delfinoterapia.